El Sansón del clásico vecindario junto al Mercado

 

Detalle de la fotografía de enero de 1935 en el archivo Chilectra, con el bar y restaurante Sansón en el zócalo del edificio hotelero de Mapocho.

No sabemos si será coincidencia el que, además del bar Hércules en el sector de calle Bandera llegando a la actual Aillavilú (frecuentado por Pablo Neruda, Oreste Plath y Luis Emilio Recabarren, entre varios más), hubiese otro boliche del viejo barrio Mapocho llamado Sansón, a la vuelta de calle Puente con General Mackenna, en el zócalo del desaparecido Excélsior Hotel que se ubicaba en donde ahora está el acceso al Metro Puente Cal y Canto, enfrente del Mercado Central.

No sobreviven hasta hoy muchos datos sobre el bar-restaurante con nombre de mítico fortachón. Puede rastrearse algo de información, sin embargo: estuvo ubicado en la dirección de calle Puente 880 llegando a la vía junto al río, en donde se halló también el Guatón Bar en el zócalo del Hotel Términus hacia el Centenario Nacional, antes de que este se incendiara en 1914, permitiendo así la construcción del nuevo edificio hotelero.

Existente desde la década anterior cuanto menos, a inicios de los treinta y cuando ya sería bien conocido en la sociedad santiaguina, su propietario era el señor Manuel Torrecilla. Su sobrina, la señorita Elena Quiroga Torrecilla, trabajó largo tiempo allí por entonces y era identificada por los clientes del establecimiento, apareciendo alguna vez entrevista por "La Nación" a propósito de un caso policial alrededor de un ex profesor suyo que estuvo en el mismo bar antes de desaparecer (jueves 28 de mayo de 1931).

En una conocida fotografía histórica del archivo de Chilectra, fechada en 1935, donde se divisa el lugar del bar-restaurante bajo el hotel, pero escondido tras los tranvías en movimiento y en la lejanía de los planos de fondo. Esta imagen puede verse en la página 89 del álbum “Luces de modernidad. Archivo fotográfico de Chilectra” (Gerencia Corporativa de Comunicación Enersis S.A., 2001), con la siguiente leyenda: “Plaza Mapocho con el Mercado Central al fondo. Carro con capacidad para 24 asientos. Enero 10 de 1935”.

Los establecimientos de tal tipo y ubicados en edificios hoteleros solían seguir una línea más o menos común, por entonces. Podemos suponer un aspecto interior aproximado del Sansón, por lo tanto, mirando a otras reliquias provenientes de la época de atracción noctámbula en Mapocho. Uno de ellos es el local del bar-restaurante Touring, la popular cantina ubicada por el lado del General Mackenna y en la misma situación especial, en la planta inferior de un edificio hotelero.

Si, de ese modo, nos orientamos por el aspecto que conservan el Turing y ootros bares mapochinos parecidos (casos de La Clínica, el primer local del Wonder Bar y uno también en los bajos del ya demolido edificio El Buque), podemos conjeturar sobre la estética y el aspecto del Sansón en medio del agitado barrio que, otrora, estaba lleno de pasajeros buscando boletos de salida para el ferrocarril o visitando frenéticos las cocinerías de los mercados. Habría correspondido, por lo tanto, a un típico bar y comedor con el aspecto que tenían estos locales hacia la primera mitad del siglo, ostentando algo de elegancia, real o ficticia, con mamparas tipo bar inglés.

Edificio del Hotel Excélsior, recién siendo concluidas las obras de construcción hacia 1916. Atrás del mismo, a la derecha de la imagen, se ve parte del caserón colonial con altillo que había sido del corregidor Zañartu en la actual calleja Gabriel de Avilés, demolido en los años veinte.

Paraderos de tranvías Mapocho, en enero de 1935 en calle Puente, junto al Mercado Central. El edificio hotelero que aparece a la derecha alojaba al bar Sansón en su primer piso y alcanza a verse su nombre sobre los techos de los carros.

Otro detalle sobre la ubicación del bar con el nombre del titán bíblico, es que marcaba casi el extremo sur de calle Puente enfrente de la parada general de tranvías en el barrio. Esto era muy cerca de la célebre La Piojera y vecino al antiguo altillo del corregidor Zañartu en la calle posterior, caserón desde el cual vigiló la construcción del Puente de Cal y Canto en el siglo XVIII. Esta situación también nos es confirmada por fotografías del álbum “Luces de modernidad” y de otras colecciones.

¿Sería el Sansón, acaso, el supuesto bar que don Pablo de Rokha solía frecuentar en esa calle junto al mercado cuando vivía en el Bristol Hotel, según decía tiempo atrás parte de la rica tradición oral y del legendario propio que rodea al polémico poeta? Pues tampoco tenemos respuesta segura a esta posibilidad, aunque quisiéramos creer que sí.

Lo que sí se puede verificar en la prensa es que el Sansón fue lugar de frecuentes eventos sociales, manifestaciones o banquetes. El Centro Social y Mutual Ideal, por ejemplo, lo tenía como sede de actividades e inauguró allí una sección especial de nuevos comedores el lunes 15 de agosto de 1938. Para el día siguiente ofreció allí también un homenaje a su socio fundador, don Carlos Acosta Ávalos, por haber sido elegido gobernador de Chañaral y prestarse ya a partir. Después, el mismo centro realizó una numerosa demostración con comida hacia fines de mayo de 1939, dirigida ahora a su tesorero, el comerciante argentino residente en Chile don Antonio de Orleans. Hubo discursos de unidad chileno-argentina por parte del propio festejado y de los señores Enzo Castro, Raúl Gómez del Campo, Víctor Pujazón, Gregorio Maureira y José Letelier. También tocó música en la sala la orquesta del mismo restaurante, presentándose durante el encuentro el payador argentino Carlos Díaz.

Posteriormente, durante la noche del martes 6 de junio siguiente, se realizó en sus comedores una celebración del centro y nuevamente con la orquesta en vivo, que era la estable del mismo Sansón. La manifestación era en homenaje y despedida para el antiguo miembro de la agrupación, el señor Oscar Letelier, quien por razones de trabajo estaba por irse a residir al sur del país.

Pero el viejo Sansón fue perdiendo sus fuerzas acabó dejando aquel lugar perteneciente al hotel. Muy poco tiempo después de las celebraciones señaladas, el 880 de calle Puente era ocupado ya por un establecimiento diferente, llamado Restaurant Don Beli. Sus propietarios eran la sociedad Sandrock y Cía., quienes donaron una copa para un torneo de fútbol en julio de ese mismo año de 1939.

Existe información sobre otra presencia cierto bar  Sansón en un lugar distinto de la ciudad, aunque también dentro del mismo Centro de Santiago. No sabemos si correspondió a un cambio de local o alguna una coincidencia de nombres. De todos modos, entre renovaciones y remodelaciones posteriores, nada ha quedado de aquel refugio mapochino, ni del elegante edificio del Excélsior Hotel que le diera cobijo.

Algún urbanista haciendo el rol de Dalila, acaso cortó el pelo al Sansón del barrio del Mercado Central.