Un club de baile y centro político: el Bar y Restaurant Pedro Donoso

 

Aviso del Bar y Restaurant Pedro Donoso de Bandera 832, en “La Nación”, año 1917.

La dirección de Bandera 832 evoca a una de las más importantes historias del "barrio chino" de Mapocho. Esta había comenzado en un inmueble ya desaparecido, en donde estuvo la sede y casino de la Unión Gremio de Lecheros, club y centro social con expendios de bebidas solo para sus miembros, según la Matrícula de Patentes Profesionales e Industriales de la Municipalidad de Santiago publicada en medios de prensa en abril de 1917. Este dato y fecha lo sitúa como otro antecedente o precursor del “barrio chino” que cobrará cuerpo especialmente a partir de los años veinte.

La publicidad del 24 de mayo del mismo año de 1917, sin embargo, presentaba así al negocio de marras en “La Nación” y con el nombre de su dueño, entre sus avisos clasificados:

RESTAURANT

Bar y Restaurant Pedro Donoso, Bandera 832. Se reciben pensionistas. Licores y mariscos frescos. Recibe órdenes para banquetes. Comida a la carta. Importación de licores finos de las mejores marcas.

Del texto se deduce que el bar y restaurante, además de sus funciones compartidas con clubes sociales, tenía servicios tipo posada y pensión heredados de ciertos formatos comerciales del siglo XIX y que se prolongaron hasta más allá del Centenario Nacional. En este caso, influyeron también los requerimientos de un barrio que quedó tan determinado por sus características de comercio popular, gracias a los mercados ribereños, y especialmente por la Estación Mapocho como centro de actividad de viajeros y pasajeros.

En aquel período, además, siendo aún años de "filarmónicas" y "filóricas" con sus salones de fiestas bailables y orquestas, la dirección del viejo local de Bandera también fue del cuartel de la Academia de Baile La Chile, que funcionaba a la vez como otro club de socios. En una nota-aviso a sus miembros, del viernes 30 de mayo del mismo año, decía a los lectores:

Mañana se llevará a efecto en su salón-teatro, Bandera 832, una gran velada baile.

En esta velada se llevarán a efecto los concursos de vals, one steps y schotings entre los socios de esta Academia únicamente.

Las bases de los concursos, por acuerdo del directorio, son las siguientes:

1.a Serie, socios más de un mes;

2.a Serie, estar al día en el pago de sus cuotas y;

3.a Serie, el ganador de cualquiera de los tres concursos no podrá tomar parte de los otros.

Este acuerdo se ha tomado en vista de que puede haber alguna pareja que pueda ganarse los tres o dos de los concursos y no les dejaría lugar a ganarse ningún premio a los demás socios concursantes.

Vista de calle Bandera hacia el norte, esquina con San Pablo, en enero de 1927, con los trabajos de las líneas de tranvías. En la esquina derecha se observa la Botica Boston, y en la izquierda un restaurante no identificado. Imagen del archivo Chilectra.

Reconstrucción gráfica aproximada al aspecto que tuvo el inmueble que alojó a El Ciclista y El Dragón Rojo en Bandera 830-832, antes del terremoto que destruyó parcialmente al mismo edificio. Era el lugar en que antes había existido el establecimiento de don Pedro Donoso en calle Bandera.

El mismo sector de calle Bandera 830-831 hacia 2010, con el segundo piso destruido y su nivel inferior convertido en casa de venta de vestuario.

Algunas reuniones políticas se hicieron en él, además. Esto era habitual en los restaurantes y cafés de aquellos años, especialmente los más populares. Uno de aquellos grupos políticos realizando encuentros en el mismo lugar del boliche era la Vanguardia Demócrata, otra corriente de fuerte presencia en el vecindario mapochino. De hecho, tenían allí también la sede social demócrata, probablemente vecina u ocupando algún sector de las mismas dependencias que, de seguro, tenían cierta elegancia para cumplir con tales estándares.

Un llamado a reunión de los vanguardistas decía en la prensa del jueves 25 de octubre de 1917, dando señales que confirman lo habitual que era su presencia allí:

Se ha citado a sesión ordinaria de los miembros de este centro de propaganda política, para hoy a las 9 P. M., en el local de costumbre: Bandera 832.

En esta reunión dará una conferencia política el joven ecuatoriano, señor Adolfo Novoa.

También se encuentran en tabla varios asuntos de interés para la institución.

Desde principios de 1918, además, el Centro Social Luz y Progreso realizaba veladas literario-musicales, en esa misma dirección del salón del señor Donoso, además de alguna fiesta de Año Nuevo. Este centro retornó al lugar luego de un período en el que estuvo operando en otro sector de la ciudad. También había realizado allí homenajes como el rendido en junio del año anterior a su secretario, a propósito de su onomástico, el señor Juan Jabbas, quien tuvo después importancia en el mundo deportivo como dirigente del Club Sirio. En febrero de ese año amenizó los encuentros del Centro la Orquesta del Centro Español, participando también artistas como Miguel Moya, Antonio Fernández, el ilusionista MacKilleff, el barítono Jacinto Zareo, Carlos Díaz y Pepe Lafuente. Algunos de estos nombres se repiten en presentaciones y fiestas posteriores del mismo grupo.

En avisos clasificados de 1923, y contando también con patente de cigarrería, aparece a la venta el local con la dirección de Bandera 832, presumiblemente el mismo negocio que había ocupado el señor Donoso. Aquella cuadra ya había comenzado a experimentar grandes transformaciones de progreso en aquel período, por lo demás.

Nuevos establecimientos construidos por el mismo lado de la manzana fueron terminados hacia 1925, y la nueva dirección del 832 pasó a ser ocupada por el Club de Operadores de Teatro, funcionando como un club social y restaurante con salón de billar y sala de tertulias. Sería el mismo caserón de altos que después alojó a los cabarets Las Torpederas y el Tabarís. Aún existe, pero muy deteriorado por el tiempo y la naturaleza sísmica del territorio chileno.